Uno de los síntomas que aparece en personas con fibromialgia es el síndrome de vejiga hiperactiva. No hay datos sobre el porcentaje de personas con fibromialgia que la padecen, pero este es uno de los síntomas que soléis comentarnos con frecuencia y que, como casi todos los síntomas de la fibromialgia, afecta en mayor o menor medida a la calidad de vida de quien lo sufre.
Se trata de un trastorno urinario que se da con mayor frecuencia en mujeres y personas mayores y que consiste en tener alguno de los siguientes síntomas:
- Sentir urgencia por orinar (la sensación aparece de repente y la persona necesita ir al baño rápidamente).
- Orinar con mucha frecuencia a lo largo del día (más de 6 veces).
- Sufrir incontinencia urinaria.
- Despertarse varias veces durante la noche para orinar, lo cual se denomina “nocturia“.
- Además, también pueden darse otros síntomas secundarios, como dolor de cabeza, boca seca o visión borrosa.
¿QUÉ LO PROVOCA?
La causa se desconoce, pero parece que la alteración en el funcionamiento del sistema nervioso vegetativo podría tener influencia en su aparición, ya que las funciones de llenado y vaciado de la vejiga están reguladas por los sistemas nerviosos simpático y parasimpático.
Por otra parte, las personas que sufren el síndrome de la vejiga hiperactiva, con el tiempo son más propensas a padecer otra patología vesical: la cistitis intersticial.
CISTITIS INTERSTICIAL
Es una afección crónica de la vejiga que tiene aspectos comunes con el síndrome de la vejiga hiperactiva, como que se desconoce su causa, que afecta en mayor proporción a mujeres y que afecta a la calidad de vida de quien la sufre.
Los síntomas son variables en cada persona y en distintos momentos pueden desaparecer, aliviarse o incrementarse (por ejemplo, durante la menstruación, estar sentada durante mucho tiempo, el estrés, el ejercicio o la actividad sexual).
Los síntomas de la cistitis intersticial son:
– Dolor, de intensidad variable en cada persona, mientras se llena la vejiga y alivio después de orinar.
– Dolor en la pelvis.
– Dolor en el periné (espacio entre el ano y la vagina en mujeres o entre el ano y el escroto en hombres).
– Urgencia por orinar.
– Micción frecuente, normalmente de poco volumen, durante el día y la noche (en algunos casos hasta 60 veces).
– Dolor durante las relaciones sexuales.
Ambas afecciones, síndrome de vejiga hiperactiva y cistitis intersticial, influyen negativamente en la calidad del sueño y tienen un claro impacto en la calidad de vida de quien lo sufre que, como consecuencia de padecerlas, puede llevarle a reducir significativamente su actividad social y condicionar la laboral.
Si tienes algunos de los síntomas descritos para estas patologías debes consultar al médico, que hará las pruebas necesarias para hacer el diagnóstico adecuado y tratarlas.
El tratamiento es variable según el grado de afectación y puede incluir fármacos, cambios en el estilo de vida, fisioterapia y otros como cateterismo, botox o cirugía.