¿Es contagioso en Síndrome de Fatiga Crónica? Algunas personas nos preguntan si es contagioso el síndrome de Fatiga Crónica. La respuesta es que NO, no es contagioso el síndrome de Fatiga Crónica.
Su causa es desconocida, aunque existen muchas teorías, que van de las infecciones virales al estrés psicológico. Lo más probable es que sea una combinación de varios factores.
Se ha buscado una relación entre el SFCem con los siguientes microorganismos, aunque aún no hay evidencias claras de la asociación del síndrome de fatiga crónica con un microorganismo concreto: virus como Epstein-Barr, Citomegalovirus, Herpesvirus tipo 6 y 7, Parvovirus B19, virus de la Hepatitis B y C, XMRV (Xenotropic MLV-Related Virus); Protozoos como Toxoplasma gondii (toxoplasmosis), o bacterias como Chlamydia (clamidiasis), Mycoplasma, Borrelia burgdorferi (Enfermedad de Lyme), Brucelosis humana (Fiebres de Malta) y treponema pallidum (Sífilis venérea)
A pesar de esta posible relación entre el desarrollo del síndrome de fatiga crónica después de sufrir algunas infecciones, no quiere decir que estos microorganismos sean los causantes del síndrome de fatiga crónica, si no que, probablemente la respuesta del cuerpo ante la infección de estos microorganismos provocaría posteriormente el SFC, incluso cuando la infección ya hubiera pasado, ya que las personas que padecen síndrome de Fatiga Crónica tienen una alteración en la respuesta de su sistema inmunitario y en la capacidad de producción de energía a nivel celular.
Por otro lado, existen otros posibles factores desencadenantes de la enfermedad que no son infecciosos, como:
- Vacunas.
- Intoxicación por pesticidas o agentes químicos tóxicos ambientales y alimentarios como insecticidas organofosforados, disolventes y por monóxido de carbono.
- Situaciones de alteración del ritmo o calidad del sueño.
- Situaciones de estrés psicológico intenso como el mobbing y el trastorno por estrés postraumático.
- También se asocia a enfermedades de origen ambiental como la sensibilidad química múltiple, el síndrome del edificio enfermo y el síndrome de la Guerra del Golfo.