Hoy te contamos cuales son los 12 alimentos anti-inflamatorios que te recomendamos si tienes fibromialgia. Un cambio de hábitos alimentarios puede ser beneficioso para mitigar algunos efectos de la enfermedad.
Puedes reducir la inflamación con una dieta variada, en el que primen las frutas y verduras, en lugar de recurrir a los medicamentos. En este artículo te ofrecemos una lista con 12 alimentos anti-inflamatorios que puedes incorporar en tu alimentación diaria sobre todo, si tienes fibromialgia o cualquier enfermedad de tipo inflamatorio.
Incluyendo en nuestra dieta alimentos naturales anti-inflamatorios podemos contribuir a mejorar nuestra salud. La fibromialgia inflama nuestro cuerpo, pero en vez de ayudarlo con medicamentos, podemos ayudarlo cambiando y mejorando nuestra alimentación.
Obviamente lo primero que debemos hacer es empezar a incorporar más productos naturales, ya que sabemos que los productos procesados son, en su gran mayoría, inflamatorios porque están altamente concentrados y tienen muchos aditivos. Por otro lado, debemos tener una alimentación variada, en la que primen las frutas y verduras, e incorporar a nuestra alimentación diaria los siguientes alimentos anti-inflamatorios que pueden ser beneficiosos si tienes fibromialgia:
1. VEGETALES DE HOJA VERDE Las frutas y verduras son ricas en antioxidantes y flavonoides que restauran la salud celular. Si te cuesta comer suficiente cantidad de vegetales de hoja verde, intenta añadirlos mediante licuados. Las acelgas, por ejemplo, poseen muchos antioxidantes como la vitamina A y C, así como la vitamina K, que protege el cerebro contra el estrés oxidativo que causan los radicales libres. Algunos de los vegetales de hoja verde más conocidos son: espinacas, rúcula, lechugas de todos los tipos y colores, repollo, etc.
2. APIO En estudios farmacológicos recientes se ha demostrado que las propiedades antioxidantes y antiinflamatorias del apio ayudan a mejorar la presión arterial, los niveles de colesterol y prevenir las enfermedades cardíacas. El apio es además una fuente excelente de potasio.
3. REMOLACHA Una buena señal de que el contenido de antioxidantes es alto en un alimento es un color intenso, y un ejemplo de ello son las remolachas. Sabemos que el término “antioxidante” es general y abarca muchos tipos de moléculas que luchan contra el daño celular que causa la inflamación. En el caso de la remolacha, el antioxidante más abundante se llama betalaína que le da a este tubérculo su color característico y sus excelentes propiedades antiinflamatorias. Cuando la añadimos la remolacha a la remolacha repara las células dañadas y aumenta los niveles de minerales como el potasio y el magnesio que son importantes para luchar contra la inflamación.
4. BRÓCOLI El brócoli es otro de los alimentos anti-inflamatorios que recomendamos si tienes fibromialgia, ya que tiene un alto contenido en potasio y magnesio, y además sus antioxidantes son particularmente potentes y antiinflamatorios. Las vitaminas, flavonoides y carotenoides del brócoli trabajan de forma conjunta para reducir el estrés oxidativo en el cuerpo y ayudar a combatir la inflamación crónica y el desarrollo del cáncer. Es mejor consumirlo ligeramente al vapor para reducir su contenido de goitrógenos, especialmente para aquellos que tienen enfermedades de la glándula tiroides.
5. MORA AZUL O ARÁNDANO AZUL Aquí hay un antioxidante que es especialmente potente, se trata de la quercetina, que se encuentra en los cítricos, el aceite de oliva y las bayas de color oscuro como la mora azul. Esta molécula es un flavonoide que reduce la inflamación e incluso el cáncer. Estas frutas son un alimento clave anti-inflamatorio para combatir los efectos de la fibromialgia.
6.. SALMÓN El salmón es una fuente excelente de ácidos grasos esenciales omega 3s. Estos aceites son las sustancias más potentes para luchar contra la inflamación a corto plazo, hasta se substituyen en algunos casos por medicamentos.
7. CALDO DE HUESO El caldo de hueso contiene minerales que el cuerpo puede fácilmente absorber: calcio, magnesio, fósforo, silicio, sulfuro y otros. El caldo de hueso contiene además condrotina y glucosamina, suplementos que se venden en tiendas de nutrición y herbolarios (por bastante dinero) para reducir la inflamación, la artritis y los dolores de articulaciones.
8. ACEITE DE COCO La combinación de aceites y hierbas es muy exitosa para tratar la inflamación. Los lípidos (grasas) y especias tienen compuestos antiinflamatorios muy potentes, especialmente el aceite de coco y la cúrcuma (el número 11). Puesto que uno de los beneficios del aceite de coco incluye luchar contra los radicales libres, se trata entonces de un tratamiento natural para la osteoporosis. El aceite de coco se puede utilizar también de forma tópica (perfecto para masajes) y para cocinar ya que es un aceite que es estable al calor y, por lo tanto, es ideal para cocinar tus vegetales antiinflamatorios.
9. SEMILLAS DE CHÍA Los ácidos grasos que se encuentran en la naturaleza están más equilibrados que los que normalmente encontramos en nuestras dietas típicas. Las semillas de chía, por ejemplo, suplen tanto aceites omega 3 como omega 6, que deberían ser consumidos de una forma equilibrada. Las semillas de chía son antioxidantes, antiinflamatorias, contienen aceites esenciales, mucina, vitaminas A, B, E, y D y muchos minerales. Por algo eran uno de los alimentos favoritos de los antiguos guerreros aztecas. La capacidad de las semillas de chía para revertir la inflamación, regular el colesterol y bajar la presión arterial las convierte en un arma fundamental en la batalla contra las enfermedades cardíacas. Puedes añadirlas a todo, incluso tu zumo favorito para darle un cuerpo espeso y aumentar su contenido en proteínas.
10. SEMILLAS DE LINO Una fuente de omega 3s, fitonutrientes y antioxidantes. Los lignatos son polifenoles con poder antioxidante para prevenir el envejecimiento, equilibrar las hormonas y mejorar la salud celular. Estos polifenoles, además, contribuyen al crecimiento de los probióticos en el tracto digestivo, e incluso se especula que pueden ayudar a eliminar el exceso de levaduras (cándida, etc) en el cuerpo. Dado su alto contenido en fibra, se recomienda triturarlas o molerlas antes de consumirlas para ayudar al tracto digestivo a acceder a sus beneficiosos nutrientes.
11. CÚRCUMA El principal compuesto antiinflamatorio de la cúrcuma es la curcumina. Se trata de un compuesto bien estudiado por sus propiedades antiinflamatorias. La cúrcuma es uno de los más potentes alimentos anti-inflamatorios para pacientes de fibromialgia (según algunos estudios) e incluso se utiliza con mucho éxito para gestionar los dolores que sufren algunos pacientes de artritis reumatoide.
12. JENJIBRE El jengibre es otro alimento que ayuda a reducir la inflamación causada por una respuesta inmunitaria excesiva. La medicina ayurvédica ha promovido el jengibre desde siempre para modular el sistema inmune. Se supone, según esta tradición, que el jengibre es efectivo para “calentar” el cuerpo y así ayuda a deshacerse de las toxinas en los órganos. Además es muy bueno limpiando el sistema linfático, que es el sistema de desecho del cuerpo. A algunas personas les ayuda mucho a superar sus procesos alérgicos y combina bien con casi todos los alimentos.